"Caballeros, a veces me avergüenzo de pertenecer a la raza humana y esta es una de esas ocasiones."
(Coronel Dax)
Ante nosotros tenemos una de las grandes obras del género bélico pero que acierta con fina puntería en tocar los grandes temas que habitualmente no se tratan sobre ese acto irracional que es un conflicto armado.
Senderos de gloria (Paths of glory, 1957) es la adaptación cinematográfica de la novela homónima de Humphrey Cobb, dirigida por Stanley Kubrick -que procedía del éxito de Atraco perfecto (The killing, 1956)-. Este se encuentra con un material de primera que solo con leer la novela uno se da cuenta de que es carne de celuloide. Un canto a la intransigencia belicista, a la locura de los estamentos militares y en resumidas cuentas a la esencia del ser humano, con su innata capacidad para la autodestrucción.
Documental de una guerra
Esta es la sensación a la que nos somete la cámara de Kubrick. El uso del blanco y negro influye mucho para denotar veracidad a los hechos acontecidos durante la I Guerra Mundial. Las escenas de guerra rodadas en las trincheras son muy realistas y angustiosas. Los combates también son muy significativos ya que muestran el espíritu de la soldadesca y de sus caudillos. El genio neoyorquino nos seduce fotograma a fotograma con un uso narrativo y dramático no solamente estético; como muchos directores hasta entonces. Pese a contar con un presupuesto reducido -no de superproducción- era bastante para los márgenes en los que se movía Kubrick y demostró con creces su valía.
El argumento del film es el siguiente: En la Francia de 1916, durante la Primera Guerra Mundial, el general Boulard ordena la conquista de una inexpugnable posición alemana y encarga esta misión al ambicioso general Mireau. El encargado de dirigir el ataque será el coronel Dax. La toma de la colina resulta un infierno, y el regimiento emprende la retirada hacia las trincheras. El alto mando militar, irritado por la derrota, decide imponer al regimiento un terrible castigo que sirva de ejemplo a los demás soldados.
No es de extrañar que con semejante crítica al ejército francés este film estuviese prohibido en dicho país hasta 1975. En mi opinión se habrían de sentir reflejados todos las fuerzas armadas de todo el mundo porqué es un ataque a todo el estamento militar, toda su maquinaria de guerra y todo a lo que ello rodea.
Binomio espléndido
Es el que conforman el actor Kirk Douglas (protagonista en el papel de Dax y productor del film) y Kubrick. En su primera colaboración demuestran mucha compenetración en sus respectivas facetas. Douglas en la cúspide su carrera ayudó a Kubrick,escogiendo un director con pocas tablas pero con mucho talento y acertó. Le dió un empujón a la carrera del director aunque es conocido que ambos nunca se llevaron pero eso desencuentro fue a raíz de su segunda y última colaboración en la célebre Espartaco (Spartacus, 1960).
El apartado técnico no está desmerecido para nada con mención del magnífico técnico de fotografía alemán, Georg Krause y el guión de Jim Thompson, Calder Willingham y el propio director del film.
El reparto es magnífico con la presencia de actores franceses e ingleses a la par. Sobretodo destacar la presencia de los dos generales protagonistas de la trama, el general Mireau (George MacReady) y el general Boulard (Adolphe Menjou) que muestran la vileza, lo desalmado e inhumano del alto mando francés. Estos dos junto con Douglas conforma el terceto que se adueña de la pantalla.
"Senderos de gloria" es abiertamente antimilitar y eso no gustó a nadie. En España no se proyectó hasta 1986. 11 años después de la muerte de ese señor autoritario con bigote que mandaba en la península Ibérica (excluyendo Portugal). Es imposible verla y que algo no se altere por dentro de una persona. Remueve conciencias y estampa los hechos sin concesiones ni florituras. Es un film que habla de sentimientos y ésa es precisamente una de sus virtudes. Insuperable película antibelicista que Kubrick intentaría volver a mostrarnos con La chaqueta metálica (The full metal jacket, 1987) pero que dista mucho de igualarla, pese a que también se trata de un buen film.
"Senderos de gloria" es irrepetible, una obra maestra del séptimo arte, pero las guerras -por desgracia- seguirán sucediéndose.
Escena preferida
Yo consideraría como una totalidad, su apertura y su final. Ambos momentos musicales pero de diferente contraste. En el inicio; la Marsellesa como una marcha bélica preparándonos a un festín épico-bélico -nada más al contrario- y en la secuencia final; la chica alemana (la mujer de Kubrick por aquel entonces) cantando una canción en el maison donde se relajan los soldados franceses que echan a llorar ante la evocación de su humanidad.
El argumento del film es el siguiente: En la Francia de 1916, durante la Primera Guerra Mundial, el general Boulard ordena la conquista de una inexpugnable posición alemana y encarga esta misión al ambicioso general Mireau. El encargado de dirigir el ataque será el coronel Dax. La toma de la colina resulta un infierno, y el regimiento emprende la retirada hacia las trincheras. El alto mando militar, irritado por la derrota, decide imponer al regimiento un terrible castigo que sirva de ejemplo a los demás soldados.
No es de extrañar que con semejante crítica al ejército francés este film estuviese prohibido en dicho país hasta 1975. En mi opinión se habrían de sentir reflejados todos las fuerzas armadas de todo el mundo porqué es un ataque a todo el estamento militar, toda su maquinaria de guerra y todo a lo que ello rodea.
Es el que conforman el actor Kirk Douglas (protagonista en el papel de Dax y productor del film) y Kubrick. En su primera colaboración demuestran mucha compenetración en sus respectivas facetas. Douglas en la cúspide su carrera ayudó a Kubrick,escogiendo un director con pocas tablas pero con mucho talento y acertó. Le dió un empujón a la carrera del director aunque es conocido que ambos nunca se llevaron pero eso desencuentro fue a raíz de su segunda y última colaboración en la célebre Espartaco (Spartacus, 1960).
El apartado técnico no está desmerecido para nada con mención del magnífico técnico de fotografía alemán, Georg Krause y el guión de Jim Thompson, Calder Willingham y el propio director del film.
El reparto es magnífico con la presencia de actores franceses e ingleses a la par. Sobretodo destacar la presencia de los dos generales protagonistas de la trama, el general Mireau (George MacReady) y el general Boulard (Adolphe Menjou) que muestran la vileza, lo desalmado e inhumano del alto mando francés. Estos dos junto con Douglas conforma el terceto que se adueña de la pantalla.
"Senderos de gloria" es abiertamente antimilitar y eso no gustó a nadie. En España no se proyectó hasta 1986. 11 años después de la muerte de ese señor autoritario con bigote que mandaba en la península Ibérica (excluyendo Portugal). Es imposible verla y que algo no se altere por dentro de una persona. Remueve conciencias y estampa los hechos sin concesiones ni florituras. Es un film que habla de sentimientos y ésa es precisamente una de sus virtudes. Insuperable película antibelicista que Kubrick intentaría volver a mostrarnos con La chaqueta metálica (The full metal jacket, 1987) pero que dista mucho de igualarla, pese a que también se trata de un buen film.
"Senderos de gloria" es irrepetible, una obra maestra del séptimo arte, pero las guerras -por desgracia- seguirán sucediéndose.
Escena preferida
Yo consideraría como una totalidad, su apertura y su final. Ambos momentos musicales pero de diferente contraste. En el inicio; la Marsellesa como una marcha bélica preparándonos a un festín épico-bélico -nada más al contrario- y en la secuencia final; la chica alemana (la mujer de Kubrick por aquel entonces) cantando una canción en el maison donde se relajan los soldados franceses que echan a llorar ante la evocación de su humanidad.
Si no la han visto a que demonios esperan!!
Calificación: 9 sobre 10.
Por encima de su mensaje antibelicista, lo que me cautiva de esta película es la sencillez y el clacisimo formal con el que está contada.
ResponderEliminarUn guión potente, directo, en el que hasta tienen cabida ciertos toques de humor. Una historia que nos incita irremediablemente a posicionarnos de parte de los soldados "traidores", que nos deja un amargo sabor, pero que también satisface y reconforta.
En el aspecto visual, la austeridad de Kubrick vuelve a ser también un elemento de fuerza. Algo así como en El Resplandor.
Gracias por traer este clásico a mi memoria.
Un saludo!
Hola. Nadine Labaki (directora de Caramel) estrena la película libanesa ¿Y ahora adónde vamos?, en España. Es una película antibelicista, dónde un grupo de mujeres se unen para evitar la guerra en su pueblo. Si os interesa, hay más información en el sitio oficial www.yahoraadondevamos.com y, si os apetece, podemos encontrarnos en facebook http://www.facebook.com/#!/yahoraadondevamos o en twitter https://twitter.com/#!/yahoradondevamo
ResponderEliminarSaludos y os esperamos!