The Jacket; paranoia temporal

" No se puede romper algo que ya está roto"

Las historias fantásticas o de ficción muchas veces se nutren del viaje en el tiempo. Es un tema muy recurrente en la sci-fi. Podemos encontrar muestras amplias como son El planeta de los simios (The planet of the apes, 1968) o El tiempo en sus manos (The time machine, 1960), por solo citar dos ejemplos concisos. Por otra parte tenemos historias que mezclan los saltos temporales con las retazos de la memoria. La concepción de realidad o ficción es algo psicológico. No estar seguro de esa concepción crea problemas al protagonista del film que trataremos a continuación.

Psicosis y locura

The Jacket (2005) es un film producido por George Clooney y Steven Soderbergh -dos pesos pesados de la industria norteamericana- entre otros muchos; destacable el magnate Mark Cuban (habitual productor de films independientes o proyectos interesantes). Fue un film que se gestó rápidamente pero el proyecto estuvo parado mucho tiempo debido a los problemas con la dirección. Finalmente, el testigo lo recogió John Maybury, director británico que aquí dirigía su segunda película. Su obra anterior trataba de un biopic sobre el pintor Francis Bacon -interpretada brillantemente por Derek Jacobi- realizado con mucho rigor y bastante fidelidad a los hechos remitentes al personaje.

Esta segunda obra fílmica de Maybury está secundada por un buen cartel interpretativo: Adrien Brody, Keira Knightley, Jennifer Jason Leigh, Kris Kristofferson y Daniel Craig. El primero es el protagonista absoluto del film. Jack Starks, un soldado de la guerra del Golfo, recibe un balazo en la cabeza. Sobrevive a este pero como consecuencia tiene problemas de memoria. Una vez en Estados Unidos es acusado del asesinato de un policía local, hecho que no recuerda. Esto le llevará a un centro psiquiátrico en el cual le realizarán unas pruebas experimentales para mejorar su conducta errática. El tratamiento consiste en atiborrarlo de drogas experimentales para posteriormente ponerle una camisa de fuerza y dejarlo encerrado en una cámara para cadáveres durante un tiempo definido. Esto le provocará saltos temporales con los cuales su cuerpo se trasladará 14 años más tarde mientras dura su estancia en la cámara.

Estamos ante un proyecto que visto su argumento se presenta interesante. Tiene trazos de paranoia y de mucha claustrofobia, sobretodo cuando el personaje de Brody está dentro la cámara. Esta película tiene bastantes influencias sobretodo bastante cercanas en el tiempo. Memento (2000) y sobretodo 12 monos (12 monkeys, 1995) recuerdan mucho a las desventuras de Jack Starks.  Lagunas de memoria, pasado no resuelto y un destino inexorable son algunos de los temas que vemos reflejados en The Jacket. Adrien Brody pese a no ser muy buen actor encaja perfectamente en el papel de tipo trastornado de un centro mental. Las escenas del sanatorio rezuman mucho estilo y mantienen la tensión por la historia que se cuenta. Por otra parte al espectador le interesa la historia del presente y los demonios internos del protagonista, pero de golpe y porrazo el director nos zambulle en el futuro de Jack y allí el film se pierde bastante. La historia pierde fuerza sobretodo por el acompañamiento actoral de Keira Knightley, actriz sobrevalorada y que siempre realiza el mismo tipo de papeles -mujer difícil, independiente y con problemas personales-. Los saltos temporales dan rienda desatada para que los guionistas nos den una historia muy manida y volátil sobre arreglar los futuros actos de uno mismo. La culpa y los remordimientos carcomen al protagonista. Su futuro se convierte en su presente y eso le reporta más problemas que soluciones. 

Mención a parte merece el estupendo Daniel Craig componiendo un excelente papel como uno de los dementes integrantes del centro psiquiátrico. Su actuación demuestra que este chico de ojos azules es muy versátil y capaz para cualquier tipo de registro.

El desenlace es típico en las historias de este calibre que no saben como terminarlas. Historia autocomplaciente y etérea. En ningún momento deja de interesar por la puesta en escena y la interesante de la propuesta inicial. Esto confirma la desmedida ambición del director. El film crea un aceptable suspense entre los diferentes tiempos potenciales que postula sin recurrir en efectismos; cosa que se agradece.

Conclusión

Entretenido film de sci-fi que precisamente flojea en su narración de los hechos futuros del protagonista. Formula preguntas básicas como el destino, la muerte, la concepción de realidad o fantasía o el pasado turbulento. El problema reside en la incapacidad de armar una historia concreta y que enganche durante todo su metraje y solo ofrezca momentos de intriga y misterio en el susodicho sanatorio. Obra que podía haber dado mucho más de si. Películas de la misma temática como El efecto mariposa (The butterfly effect, 2004) resuelven mucho mejor la situación con un elenco de medios mucho menos estimable.

Calificación: 6/10.